Hoy os voy a dar un consejo. Ya veréis lo útil y practico que es tener unos botes de carne de pimientos rojos en conserva en nuestra despensa o frigorifico, para agregar y enriquecer nuestros guisos de pescados, carnes, verduras y arroces. Es muy fácil de hacer y lo prepararemos en muy poco tiempo.
He empezado a hacer carne de pimientos rojos en conserva a partir de que se me acabara el bote que había comprado en un puesto, elaborado por una campesina mayor, preparados por ella para venderlos juntos con sus verduras, aceitunas también aliñadas por ella, quesos y otras conservas... en el mercado de Vila Nova de Milfontes en Portugal la primavera pasada.
Elegiremos unos pimientos rojos hermosos y carnosos para hacer nuestra carne de pimientos, he decidido preparar cuatro botes pequeños para que me duren un tiempo. Si os parece mucho, con un pimiento tenemos para un bote, y no hace falta hacerle el vacío porque es el que tendremos en uso, para ir agregando a nuestros guisos y lo guardaremos en el congelador.
Una vez abierto un bote de carne de pimiento rojo en conserva, lo conservaremos en el congelador, hay que tener en cuenta que el bote nos puede durar un tiempo, porque emplearemos un par de cucharadas en cada guiso.
Os aconsejo que cuando hagamos la carne de pimientos rojos seamos generosos con el aceite y que empleemos aceite de oliva virgen extra de la calidad de La AlDea de Don Gil.
INGREDIENTES:
3 pimientos rojos hermosos.
Aceite de oliva virgen extra.
Quitamos los rabillos con las pepitas a los pimientos, enjuagamos cortamos en trozos.
En una cacerola amplia vertemos un buen chorro de aceite, vamos agregando los pimientos cortados en trozos, colocamos en el fuego a temperatura suave.
Tapamos la cacerola cuando tengamos todos los pimientos cortados dentro.
Cuando estén los pimientos bien tiernos.
Los pasamos por el pasapuré.
Una vez tengamos todos los pimientos pasados.
Movemos bien para que se mezcle la carne con el aceite.
Repartimos la carne de pimientos en los botes.
Colocamos las tapaderas y metemos en una olla alta cubiertos de agua incluyendo las tapaderas, cuando empiece a hervir el agua tapamos, bajamos el fuego al mínimo durante media hora.
Cuando estén templados los botes sacamos del agua y guardamos en la despensa o en el frigorifico.
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