Cómo hacer guisantes con jamón ibérico. Receta paso a paso.
Hoy vamos a hacer unos deliciosos guisantes con jamón ibérico, ya que estamos en el comienzo de la temporada que cada vez es más temprana.
Es una de las maneras de cocinarlos más exquisita siempre que el guisante sea de alta calidad, junto con un buen jamón ibérico y un buen aceite de oliva virgen extra. La AlDea de Don Gil.
Vivo en una zona en donde se planta crece y recolecta una de las mejores variedades de guisantes del país; por su finura, tamaño, sabor y textura.
Cuando mi amiga garbiñe vino al Puerto a vivir una temporada con nosotros, descubrió los guisantes frescos (en el norte se venden secos) y que comprabamos en la plaza de Abastos. Muchas mañanas bajabamos del Caserón las dos en una mobylette pequeña que ella tenía al mercado a hacer la compra, colocábamos una bolsa a cada lado del manillar y otra en el brazo apoyada sobre mis rodillas. Los hacía con frecuencia con jamón ( a la francesa decía ella), les encantan, es toda una experta haciendo guisantes con jamón, los mejores que he comido...
Desde entonces cuando es temporada de guisantes y coincide en que ella baja o nosotros subimos, viajamos con una caja de guisantes, si no, se los envío por Seur, para que todos los años pueda comer unos guisantes con jamón...
Aprovechando que hemos comprado la paletilla de jamón ibérico para las navidades, y todavía se le puede sacar unos trozos para cocinar, he sacado un paquete de guisantes de temporada (como dice mi amiga Magdalena "de los de verdad") del congelador, porque no se puede dejar pasar esta oportunidad de preparar unos guisantes con jamón ibérico a la francesa, para tomar en una cena de bienvenida, de regreso de las vacaciones, a continuación de una sopa de picadillo.
800 gr. de guisantes desgranados.
6 cebolletas tiernas.
100 gr. de jamón ibérico.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Ponemos en el fuego una cacerola con un buen chorro de aceite, agregamos las cebolletas cortadas.
Cuando estén pochaditas agregamos los guisantes, tapamos la cacerola y dejamos unos minutos a fuego muy lento para que suden.
Agregamos el jamón picadito, añadimos medio vaso de agua, tapamos de nuevo la cacerola, dejamos a fuego mínimo para que se hagan en su propio jugo durante 30 minutos, dándole unas vueltas de vez en cuando.
Pasado los 30 minutos probamos para saber como están de tiernos y de sal, teniendo en cuenta que el jamón aporta mucha sal, agregamos algo de sal y le damos unos minutos más si es necesario, todo dependerá de la calidad de los guisantes.
Los guisantes tienen que quedar tiernos, que se deshagan cuando te lo metes en la boca, sin notar la piel, para eso los guisantes deben de ser muy finos.
Los guisantes no deben quedar caldoso, se tiene que crear una salsa con el poco agua que le hemos agregado junto con la que sueltan los propios guisantes mezclada con las cebolletas y el aceite.
En la boca al masticar se convierten en crema. ¡exquisitos!
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