MI COCINERA FAVORITA : CROQUETAS DE PUCHERO CON CURRY Y HIERBABUENA.

Cómo hacer croquetas de puchero con curry y hierbabuena. Receta paso a paso.

En esta época del año cuando el frío empieza a calar hasta los huesos, más por la humedad al vivir tan cerca del mar que por la temperatura, es el momento de entonarse el cuerpo con deliciosas sopas, cocidos y cómo no con nuestro clásico puchero andaluz, que se convierte en uno de nuestros platos estrellas en invierno, aprovechar la carne, no solo para acompañar tan riquísima sopa, se hace casi una tradición.

Un caldo sencillo de verduras con carne de ternera y pollo o gallina, también en estas fechas con unos trozos de pavo, al que le agregamos un puñado de garbanzos. Un puchero que da mucho juego, de él podemos obtener los dos platos del menú, nos permite varias posibilidades, por ejemplo: de primero una sopa con fideos o con arroz y unos cuantos garbancitos salteados y de segundo las verduras junto con las carnes (lo que llamamos la pringá del puchero), otra opción es sofreír las carnes ya limpias con ajo o cebolla, agregarles patatas fritas y hacer un revuelto o tortillón, también podemos hacer ropa vieja (todas las carnes limpias, fritas junto con los garbanzos y metidas en tomate frito) y la opción más valorada o apreciada es la de hacer croquetas de puchero.

Para preparar unas croquetas de puchero no hace falta hacer un guiso completo de puchero andaluz con garbanzos y todos los avíos, nosotros en Andalucía solemos aprovechar los restos de las carnes para preparar las croquetas. Esta receta es otra de tantas que entra en el campo de "recetas de aprovechamiento" como os comenté en la de sopa de tomate, se trata de un plato humilde que sirvió para alimentar a generaciones desfavorecidas economicamente y que en la actualidad, es una exquisitez que disfrutan todo tipo de paladares.

En invierno en todos los hogares andaluces se hace puchero en unos más que en otros, incluso yo diría que en muchísimos una vez a la semana y preferiblemente el domingo, el menú típico de muchas familias era de primero un plato de sopa (de fideos cabello de ángel o arroz) y de segundo pollo en salsa o unas rodajitas de carne mechada, se consideraba una comida suave para el día de fiesta. Entonces lo más normal era que el lunes por la mañana se hiciera la masa para hacer croquetas y comerlas el martes después de las lentejas...

Parece mentira toda la vida haciendo y comiendo las croquetas del puchero sin darle importancia, las entendíamos como un plato de aprovechamiento y por ello no le dábamos valor, ahora todos vivimos más deprisa y ya apenas les dedicamos tiempo a la cocina y menos aún en preparar los caldos caseros, los compramos en tetrabrik y las croquetas empaquetas y congeladas de mil sabores y hasta nos encontramos algunas que dicen que son de sabor y fabricación casera, y que decir de bares y restaurantes en donde las croquetas ocupan un lugar preferentes en sus cartas, ofreciendolas como algo muy especial, todos las pedimos como algo rico y terminamos decepcionados diciendo, no son como las de antes...

Como os digo voy a preparar estas croquetas aprovechando la carne de los trozos de pavo, de los huesos de jamón y las verduras que he utilizado para el caldo de cocer el pavo trufado que son los ingredientes básicos del caldo de puchero pero con más sabor al estar las carnes enriquecida con los vinos y las especias del macerado del pavo.
En casa nos encantan, además nos gusta con tropezones, con muchos tropezones y con una nota de sabor a cebolla de fondo. Son irresistibles tanto recién hechas como frías y bajo mi punto de vista , prepararlas puede resultar un tanto entretenido, pero el resultado merece la pena.

En los días previo a las fiestas estando ya englobada preparando mi menú para estos festejos procuro ser práctica y sacarle el máximo provecho a lo que cocino, intentando que mis platos estén relacionados unos con otros, que de una receta salga otra, como en este caso, que hago las croquetas con la carne y el caldo reservado de haber hecho el pavo, que todo sea reutilizable y de provecho y no por ello desmerezca.

Nos viene muy bien en las vacaciones tener un táper de croquetas en el congelador para sacarlas en cualquier momento, bien para una cena improvisada o porque nos entretengamos en la calle tomando unos vinos, algo que ocurre muy a menudo en estos días tan señalados y de encuentros entrañables.

Para preparar estas croquetas partimos con los ingredientes tradicionales pero a la hora de hacerla le damos un giro de tuerca, un toque diferente porque se presta a ello, admite alguna variación como por ejemplo que se le puede añadir algunas especias y hierbas aromáticas que le aporten aroma y sabor a las carnes sofritas con la cebolla y así enriquecer la masa.

Además cuando las hacemos no debemos preocuparnos por la cantidad, ya que nos ponemos a hacerlas, es mejor hacer una buena cantidad de masa porque se pueden congelar ya empanadas, así que rebozamos, empanamos preparamos en porciones y a congelar, para sacarlas un rato antes y freírlas cuando más nos apetezcan...

Sin más dilación comenzamos. Si lo puedo hacer yo, seguro que a vosotros os saldrá mejor todavía. Os dejo con esta ¡riquísima! receta paso a paso de croquetas de puchero con curry y hierbabuena, para que os animéis a hacerla conmigo.

INGREDIENTES:

Carnes del cocido.
Verduras del cocido.
400 ml. de caldo.
Aceite de oliva virgen.
1 cebolla.
6 cucharadas de harina.
1 cucharada de curry turco.
1 cucharada de cúrcuma.
1 cucharada de pimienta.
Hierbabuena unas ramitas.
3 huevos gordos.
Pan rallado y sal.

PARA LA ENSALADA:

Un trozo de lombarda.
4 tomates cherry.
medio aguacate.
Un trozo de pimiento rojo.
Un trozo de pimiento verde.
5 dátiles.
Sal.
vinagre de Jerez.
Aceite de oliva virgen extra.

Elaboración
Lo primero que haremos será limpiar la carne de ternera de grasas, le quitamos la piel, los cartílagos y huesos a los trozos de pavo, le quitaremos también la piel y la grasa a los huesos de jamón, picamos todo pequeñito. limpiamos las verduras y cortamos también muy pequeñito. Reservamos.

En una sartén grande echamos un chorro de aceite y la cebolla muy picadita, ponemos a fuego medio.

Cuando esté la cebolla pochadita agregamos las verduras, les damos unas vueltas.

Agregamos toda la carne picada, salteamos.

Añadimos las especias y salteamos.

Añadimos las cucharadas de harina, removemos con cuchara de madera hasta que el sofrito adsorba toda la harina.

Agregamos el caldo y vamos moviendo poco a poco en circulo hasta que absorba todo el caldo.

Añadimos las hojas de hierbabuena bien picadita, mezclamos.

Agregamos un poco de sal, probamos si es suficiente y cuando la masa esté suelta despegada de la sartén, estará lista.

Volcamos la masa en una fuente amplia y dejamos enfriar.

Cubrimos con un film y una vez fría guardamos en el frigorifico.

En principio cascaremos dos huevos en un plato hondo, los batimos, colocamos el pan rallado en un recipiente amplio.

Con la ayuda de una cuchara iremos cortando la masa en trozos rectangulares, más o menos del tamaño que queramos hacer las croquetas.

Moldeamos con las manos.

Y vamos colocando sobre el pan rallado.

Le damos unas vueltas para que se cubran las croquetas de pan rallado.

Las pasamos por el huevo.

Volvemos a pasarlas por pan rallado.

Y las colocamos en una fuente o fiambrera.

Colocamos un film entre las capas de croquetas para que no se peguen.

Cuando tengamos todas las croquetas hechas cubrimos con otro film, cerramos y dejamos reposar.

Picamos muy pequeñita las verduras y dátiles que hemos seleccionado.

Mezclamos la ensalada, le ponemos un poco de sal vinagre de Jerez y aceite de oliva virgen extra.

Vertemos abundante aceite en una sartén a fuego medio, cuando esté caliente introducimos las croquetas.

Iremos dándole vueltas para que se frían lentamente por todos los lados, para que le llegue el calor hasta el centro y se dore por igual por todos los lados.